No, son bi-fuel. Los vehículos a GLP se denominan BiFuel por que se puede utilizar tanto con GAS como con GASOLINA. El vehículo lleva siempre dos depósitos (el original de gasolina y el que se añade de GLP) pudiendo cambiar de un combustible a otro con tan sólo tocar un botón situado en el salpicadero del vehículo. De esta manera podemos utilizar el combustible que queremos en cada momento.
Seguimos circulando. Cuando el vehículo haya consumido el AutoGas del depósito, saltará una señal acústica desde el indicador de nivel de gas avisando al conductor que, desde ese momento, el vehículo ya está funcionando con gasolina de forma automática. El conductor solo tendrá que pulsar en el botón central de dicho indicador para detener la señal acústica.
No es para nada peligroso, en caso de impacto el depósito es mucho más resistente que el ordinario, con lo que es muy difícil que el depósito pueda romperse. En caso de incendio, es incluso más seguro que el de gasolina, ya que gracias a la válvula que regula la presión, nunca se produciría una sobrepresión dentro del depósito. Algo que no se puede evitar en los depósitos de gasolina.
No cambiamos nada. Lo sencillo de todo esto es que no se cambia ni una sola pieza del motor de origen. Únicamente se añade una toma a la admisión del motor para que pueda entrar el GAS a los cilindros.
De todas las marcas a gasolina. Se puede montar sobre cualquier marca y modelo, siempre y cuando éste tenga motor de gasolina (los coches deben haber sido fabricados más tarde del año 2000).
Todo lo contrario, el GLP es un combustible que cumple todas las especificaciones de la gasolina siendo éste más limpio. Esto incide en una mejor conservación de los órganos del motor.